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CAMPO DE SAN ANTONIO
Es uno de los parajes más bellos de nuestra ciudad. Se conoce con este nombre desde el siglo XVI cuando se construye el convento de S. Antonio de Padua, de la orden franciscana. El convento abandonado forzosamente debido a la Desamortización quedó vacío y, unas décadas después, por orden del administrador del Conde de Lemos (Duques de Alba) se practica la demolición del edificio. De él pocas pertenencias se conservan, al menos que se sepan. Un crucero que preside el Campo de S.Antonio, del siglo XVI y que estaba en la calle que hoy denominamos Antonio Méndez Casal, es una de las piezas más destacadas del extinguido convento. También podemos ver unas columnas de piedra en la que se apoyan unas galerías de madera de edificaciones del Campo de S. Antonio. Un altar que se encuentra en la iglesia parroquial de Piñeira y un bajorrelieve que se encuentra en la capilla particular de S. Pedro, situada en la calle Doutor Casares, son dos de las piezas más sobresalientes de este edificio hoy desaparecido.
En el año 1877 se decía que había que celebrar el mercado de legumbres, granos y castañas en el Campo de S. Antonio. En el Crucero de S. Antonio se colocarían la cacharrería de todas clases y los vendedores de carbonilla. En la década de los 10 del siglo XX se estableció el primer local fijo dedicado a cine. En un barracón, se encontraba el “Cine Barbagelata”. Después del barracón del Campo de S. Antonio , pasó a la actual Avenida de Galicia. En la publicación “Claridades”, del año 1917 nº 6, anuncia el Cine Moderno Barbagelata, en fecha 24 de abril de 1917. Durante el Directorio del General Primo de Rivera, gracias a las gestiones del bien recordado alcalde D. Antonio Dacal, se levanta el edificio donde se ubica actualmente las dependencias municipales. En su momento fue destinado a escuelas de enseñanza. Durante la II República, funcionó un Instituto de Enseñanza Secundaria. En el año 1939 se informa de la llegada del 1º Batallón del Regimiento de Artillería de Zaragoza, al objeto de quedar de guarnición permanente en esta ciudad. Al no existir edificio donde albergar dicha tropa, los munícipes deciden dividirla en tres edificios, entre ellos, el de enseñanza de S. Antonio.
Pasado unos años, recupera su funcionalidad como escuela hasta que, llegamos a los últimos años de la década de los 90 del siglo XX. En este momento, las gestiones del Alcalde D. Nazario Pin, conllevaron que la Consellería de Educación traspasara el edificio al Ayuntamiento y, previas reformas se convirtiera en el año 2001 en la nueva Casa Consistorial. En la década de los años sesenta, uno de los mejores alcaldes de Monforte de Lemos, D. Guillermo Fernández Otero, realizó obras de urbanización y ajardinamiento en el Campo de S. Antonio. Dos décadas después, el alcalde D. Celestino Torres mejoró la estética de este lugar tan emblemático de nuestra ciudad.
"Desde, por lo menos, el siglo XV-XVI, se cita
en documentos consultados, el CALLEJÓN DEL TINTER. Todavía hoy se
conserva. Está, fisicamente hablando, entre el fin de la rúa Antonio
Méndez Casal, inicio con la rúa Ourense y Campo de S.Antonio. Baja al río
Cabe. Para más señas, está justo al lado del bar "O Cruceiro". Es el punto de celebración de las fiestas de barrio más importantes de la población. Nos referimos a las que se celebran en honor de S. Antonio el día 13 de junio.
felipe aira pardo |
