Renfe en Monforte (videos y fotos)
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Monforte de Lemos, por su estratégica
situación geográfica, en 1.883, fue el núcleo por donde entró el tren,
desde tierras castellanas, a la región gallega. El primero de septiembre
de ese año, procedente de Madrid, el rey Alfonso XII llegaba a Monforte,
en el viaje inaugural de la línea férrea que unió la capital de España con
la ciudad portuaria de A Coruña. Este camino de hierro facilitó la
comunicación de Galicia con Castilla, hito histórico que suponía el final
del secular aislamiento de las periféricas tierras gallegas.
La capital de Lemos, con la llegada del tren,
vehículo de desarrollo y de nuevas ideas, se convirtió en el principal
nudo ferroviario de Galicia. Desde la estación monfortina se distribuía,
hacia los ejes Lugo-Ferrol-A Coruña y Ourense-Vigo, el creciente tráfico
de viajeros y mercancías que entraba en Galicia procedente de Castilla y
Cataluña y también del que salía de suelo gallego hacia esas regiones.
Aquí, en las diferentes secciones
ferroviarias, desde la llegada de las primeras máquinas de vapor hasta
mediados del pasado siglo, trabajaron miles de operarios, que asentados en
el barrio de La Estación, dieron vida a un Monforte moderno, cosmopolita y
liberal. Buena parte de la historia del ferrocarril en Galicia se escribió
en Monforte. Las instalaciones de RENFE en la capital de Lemos, todavía en
la actualidad, son las más extensas que la empresa tiene en la Comunidad
gallega, con una superficie de más de 270.000 metros cuadrados. En este
espacio se localizan: la estación de viajeros y mercancías, la reserva de
locomotoras, talleres de material rodante, almacén de productos
ferroviarios y una vieja rotonda de máquinas, entre otras dependencias
auxiliares.
Monforte creció, social y económicamente, al
calor del fuego de las calderas y el humo de las viejas locomotoras de
vapor, que como las Mikado, Santa Fe o Mastodonte circulaban por los
caminos de hierro en los tiempos dorados del tren. La reconversión
ferroviaria iniciada en la década de los años sesenta, acelerada en los
noventa, dejó a la vieja ciudad condal huérfana de una de sus principales
fuentes de riqueza. Hoy, el nudo ferroviario de Lemos, que se resiste a
morir, es un reflejo de lo que fue durante la primera mitad del siglo XX.
Pese a todo, la huella del tren y el olor a ferrocarril persisten en
Monforte.
A pesar de unas recientes circunstancias
coyunturales adversas, que dieron lugar a que la capital de Lemos
perdiese la pujanza ferroviaria que tuvo hace algunas décadas, nadie le
puede negar a la capital de Lemos haber sido la cuna del ferrocarril en
Galicia. Aquí, durante más de medio siglo, la vida de la ciudad giró en
torno a la estación, los talleres ferroviarios y las vías que, como
cinturones de acero, ciñeron el núcleo urbano. Esta historia de Monforte
y también de Galicia es la que se pretende preservar y mantener viva La
Fundación dos Ferrocarrís de Galicia, entidad que promueve y gestiona
el MUSEO DO FERROCARRIL DE GALICIA, al que se está dando vida en esta
tierra del sur lucense, corazón de la Ribeira Sacra.
OBJETIVOS DEL
MUSEO
Además de mantener viva esa memoria histórica
del tren en Monforte y Galicia, son objetivos de este museo:
-
-
La conservación, catalogación,
restauración y exposición ordenada de sus fondos materiales y
documentales de valor histórico o artístico que guarden relación con el
ferrocarril.
-
-
Difundir los aspectos culturales
relacionados con el ferrocarril en nuestra Comunidad.
-
- Promocionar
los beneficios socio-económicos y medioambientales de este medio de
transporte.
-
- Fomentar
la investigación sobre el transporte y sus modos y la del patrimonio
ferroviario histórico de la Comunidad Autónoma Gallega.
-
- Dar
a conocer y alentar la utilización por la sociedad del transporte por
ferrocarril.
TREN TURISTICO DE
ÉPOCA
La prioridad de este museo es el tren
turístico de época, denominado “Galaico Expreso”, que pretende
ser un museo vivo rodante, que circule por toda Galicia por trayectos
estudiados y predeterminados por su especial interés. La meta a lograr es
convertir al “Galaico Expreso” en una especie de buque insignia del
ferrocarril turístico en nuestra Comunidad, a la vez que servirá para
difundir la historia pasada y por venir del tren en nuestra tierra y
proyectar la imagen de Galicia en el exterior.
El tren turístico de época “Galaico
Expreso” lo forma distinto material ferroviario de época. Destaca una
locomotoras de vapor tipo Mikado, una diesel Alco de la serie 1800 y una
electrica 7700, que tiran de un convoy integrado por un coche salón,
coches cama, vagón restaurante, coche cafetería, vagón cine y un furgón
generador.
UBICACIÓN DEL MUSEO
El Museo do Ferrocarril de Galicia se ubica en las antiguas instalaciones
ferroviarias que en su día albergaron uno de los más importantes depósitos
de tracción vapor del norte de España. Estas históricas instalaciones
disponen de una nave circular con un diseño propio de la arqueología
industrial de principios del siglo XX y una playa con 40 vías que se
enlazan a través de un puente giratorio que se utiliza también para
invertir la marcha de la locomotora de vapor.
FUNDACIÓN DOS
FERROCARRILES DE GALICIA
Para regir promover, encauzar y coordinar las iniciativas del museo, se
creo la “Fundación dos Ferrocarría de Galicia”.
El patronato de esta Fundación esta compuesto por: La Conselleria de
Política Territorial, Obras Públicas e Vivenda, de la Xunta de Galicia;
las diputación provinciales de Lugo y Ourense; el ayuntamiento de
Monforte de Lemos, la Fundación de los Ferrocarriles Españoles y otras
empresas y particulares.
El presidente del Patronato es D. Alberto Núñez Feijoo, Conselleiro
de la Xunta de Galicia.
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MATERIAL
FERROVIARIO EMBLEMÁTICO DEL MUSEO
Locomotora de vapor “Mikado” 141 F 2111
De diseño Inglés, fue construida en 1953 en Gran Bretaña por la factoría
North British Locomotive Company de Glasgow, Escocia.
Fue adquirida por RENFE para prestar servicio en todas las líneas
españolas arrastrando trenes de viajeros y mercancías hasta el final de la
época del vapor, en 1.975.
Se evito su desguace al asignarse, en 1980, al Museo Nacional del
Ferrocarril.
En 1.983 es reparada en los talleres catalanes de Caldensa para traccionar
el tren turístico “De la fresa” que circula entre Madrid y Aranjuez.
La locomotora Mikado 141 F 2111 monta un bastidor con seis ejes, dos
portadores y cuatro motores. Un eje portador (bisel) en la parte anterior,
cuatro motores y otro en la parte posterior. Dispone de un ténder acoplado
donde se ubican los depósitos de agua y fuel.
La máquina pesa 170 toneladas y desarrolla una fuerza de tracción de dos
mil caballos. Alcanza una velocidad máxima de 100 kilometros arrastrando
trenes de 15 mil toneladas.
Locomotora Diesel-Eléctrica Alco, serie 1800
La locomotora Alco 1812 (American Locomotive Company) fue
construida por esta firma americana en su factoría de Canada, en 1.954.
Llegó a Galicia en 1958 y quedó asignada al depósito de tracción de
Monforte.
Desde Monforte se destinó a remolcar los trenes expresos entre
León-Ponferrada- A Coruña y Ourense-Vigo-Santiago- A Coruña.
Desde 1.962, hasta su retirada del servicio, arrastró el popular tren
“Shangai” Barcelona-Monforte-A Coruña.
Dejo de prestar servicio en 1.993.
La locomotora Alco 1812 monta un bastidor con dos Bogies y seis ruedas de
1016mm. Dispone de un motor diesel de 1800 caballos que genera
electricidad para sus seis motores de tracción que desarrollan una
potencia de 1105 Kw. El peso de la locomotora es de 110 toneladas.
Coche salón ZZ1 ( coche presidencial)
El coche salón ZZ1 es un vagón con caja de madera construido en
Beasaín en 1.929 para el director de la Compañía de los Ferrocarriles del
Norte. Dispone de un salón, dormitorio con gabinete de trabajo, aseo con
ducha, cocina y compartimiento de acompañantes. Está dotado con
calefacción y Aire Acondicionado y teléfono. (Luis Blanco)
Locomotora eléctrica 7722
La locomotora
eléctrica 7722, fue recuperada por los alumnos del Obradoiro
de Emprego “Galaico Expreso II” (2002-2003), los
miembros del taller trabajaron un año en su arreglo, al encontrarse
seriamente dañadas diferentes partes de la máquina.
La 75 locomotoras de la
serie 7700, fue comprada en Gran Bretaña, de ahí su viene el calificativo
de “las inglesas”y fueron principalmente asignadas para prestar
servicio,entre otros, en las empinadas rampas de Pajares y Brañuelas por
las lineas electrificadas de Gijón-León y León-Monforte.
-Sólo
hay tres: Renfe había comprado en la
década de los años 50 del siglo pasado un total de 75 unidades, de las
que sólamente solamente quedan cinco. Tres, entre ellas la que ha sido
recuperada en la ciudad del Cabe, están operativas y otras dos están muy
dañadas. El resto fueron desguazadas.
La 7722 pesa 120 toneladas y dispone de 3.000 caballos de potencia.
Sus seis motores ejercen una fuerza de tracción de 13.800 kilogramos.
En
el Obradoiro de Emprego tuvieron que cambiar totalmente el
sistema eléctrico y otras muchas piezas de la locomotora, trabajo que se
prolongó durante un año. (Pablo Casanova)
otras fotos
Jose Ramon Casanova Otero
Monforte de Lemos, 5 de marzo de 2004 |