Día 6/9 Llegada a katowice y 7/9 visita a una mina de sal y a Cracovia.
El día 6 de septiembre fuimos recogidos a las 5 de la
madrugada por un coche que nos transportó al aeropuerto de Barajas en
Madrid, allí después de esperar más de tres horas pasamos los
controles correspondientes y a las 13,40 cogimos nuestro en un avión de
Luthansa que nos llevó hasta Frankfurt, donde a toda prisa tuvimos que
recorrer una gran parte de este aeropuerto, que es uno de los más
grandes del mundo para coger nuestro vuelo que nos llevaría a katowice
en Polonia. Tuvimos un vuelo normal, sin ningún contra tiempo y cerca
de las 19 horas llegamos a nuestro destino, un aeropuerto que parecía
de juguete después de pasar por Barajas y Frankfurt. En el aeropuerto
nos esperaba Tony Salomon que nos transportó a mi al hotel Silesia (en
el centro de katowice) y a Pablo con uno de los alumnos que lo acogió,
digo uno de los alumnos porque eran varios alumnos los que querían
acogerlo y al final estuvo tres días en casa de un alumno y otros
cuatro en casa de una alumna. En el Hotel silesia nos esperaban nuestras
colegas italianas, Gracia y Matilde. Este primer día fue muy curioso
porque no son muchos los polacos que hablen Inglés u otra lengua aparte
del Ruso, así que en el restaurante tuvimos nuestra primera prueba de
fuego con las camareras que no hablaban nada más que polaco y nosotros
no sabíamos más de seis o siete palabras en polaco cada uno y además
eran las mismas. las camareras tuvieron mucha paciencia con nosotros ya
que teníamos que pedir las comidas con los dibujos que Matilde hacía
en un bloc, al final nos trajeron alguna cosa que nosotros no habíamos
pedido, pero todo estaba muy rico, ya que la cocina polaca es de muy
buena calidad. Tomamos un Kawa (café) y a las nueve nos fuimos al hotel
ya que estábamos muy cansados y al día siguiente empezaban nuestras
visitas y trabajos.
El día 7/9, a las nueve estábamos en la escuela donde fuimos recibidos por la Directora, la profesora de Biología, la profesora de Italiano que hacía de interprete a los profesores italianos, una profesora de castellano que nos hacía de interpretes a nosotros, tres alumnos en representación de los alumnos polacos y Tony Salomon que es el profesor encargado del proyecto Comenius en Polonia. Las dos traductoras fueron imprescindibles en nuestra visita ya que en la mayor parte de las visitas teníamos personas que nos explicaban en polaco y cuando teníamos que hacer alguna pregunta si no fuese por estas profesoras, solamente con el Inglés no iríamos a ninguna parte, ya que como decíamos anteriormente en Polonia la mayor parte de la población solamente habla polaco. VER FOTOS Una vez hechas las presentaciones, salimos hacia Cracovia, antes de llegar paramos en Wieliczka, una mina de sal que es Patrimonio Mundial de la Unesco (está funcionando desde el siglo XIII, los polacos supieron aprovechar y restauraron la mina con los elementos necesarios para que miles de personas bajen a sus más de 140 metros por más de 600 escalones (en algunos lugares existen galerías a más de 300 metros de profundidad), a lo largo del recorrido un guía que fue preciso contratar antes baja con nosotros para evitar que nos perdamos, que no tengamos ningún accidente y al mismo tiempo nos explica todos los pormenores de las instalaciones. En estas instalaciones nos comentaba que el mineral del que se saca la sal tiene muchas más sales que el cloro y el sodio que son las que le dan dan el color oscuro al mineral. En este lugar nos explicaron como se sacaba la sal en el interior e incluso cuando por las grietas salía agua con las sales y las gentes del lugar calentaba el agua para evaporarla y en los recipientes les quedaba la sal. Aquí y a más de 120 metros de profundidad se encuentra la iglesia que seguramente será la más profunda del mundo, es una sala de casi 500 metros cuadrados con muchas imágenes esculpidas en las paredes, estas imágenes a veces se vuelven caprichosas porque la humedad hace crecer estalagtitas que crecen a unos 2 cm. por mes, así que cada poco tiempo tienen que limpiarlas, ya que ellas por si solas van cayendo. Después de ver todos los sistemas para sacar el mineral y los mecanismos para transportar el agua cargada de sales, llegamos a una sala enorme, en ella según nos contaron se hacen festivales de música, y celebraciones, las dimensiones de esta cámara hacen que tengan una acústica especial para oír música. Al final se llega después de unas dos horas bajando escaleras y viendo cámaras y sistemas para trabajar, nos encontramos con una cafetería donde casi todo el mundo consume algo, porque en este lugar se espera por los ascensores que nos llevan a la superficie (también se puede subir andando, pero según el guía no lo hace casi nadie). Así que después de tomarnos nuestro Kawa en la cafetería "tal vez" mas profunda del mundo subimos en un ascensor desde unos 150 metros de profundidad en dos ascensores super estrechos, de unos dos metros de largo por unos 70 cm. de ancho 13 personas en cada uno y al cabo de unos pocos minutos en la más completa oscuridad se llega a la superficie, donde este día lucía un sol expléndido que se agradecía después de pasar tanto rato en las profundidades. (REALMENTE ES UNA FORMA EXQUISITA DE GESTIONAR Y EXPLOTAR UNA MINA ABANDONADA, QUE EN MUCHOS LUGARES ESTARÍA ABANDONADA, PUES AQUÍ LA RESTAURARON Y LA ACONDICIONARON PARA EL TURISMO Y SON MUCHAS LAS PERSONAS QUE ESTÁN VIVIENDO DE ALGO QUE DE OTRA FORMA EN POCO TIEMPO ESTARÍA TOTALMENTE DESTRUIDA POR LA HUMEDAD Y LA SAL. UN EJEMPLO DE UTILIZAR ALGO QUE YA NO VALÍA PARA NADA Y QUE DA VIDA A TODO EL PUEBLO Y A LOS ALREDEDORES DE LA MINA..) |