Seis medallistas olímpicos se reúnen en el 25 aniversario de las Olimpiadas del 1992 de Barcelona en el 39 Zuzich Maratón de Barcelona, una carrera que recorre las partes más emblemáticas de la ciudad, este año de los más de 20.200 corredores más de la mitad son extranjeros.
Mas información de la carrera en: periódico Marca
La prueba la ganó el Keniata Jonah Kipkemoi, que partició como liebre y al final a ver que los que tenían que suplirle no estaban, tiró y llegó a meta en 2: 08: 56, (este corredor corrió en las Olimpiadas de Londres como mediofondista paralímpico).
El segundo en llegar a la meta fue el también Keniata Jacob Cheshari Kirui en 2:09:24, este corredor también salió como liebre. Los tres siguientes atletas también fueron Keniatas.
Historia del ganador: El periódico de Barcelona
Jonah Kipkemoi quería participar en esta carrera como liebre para emplear los 3000 euros que le iban a dar para comprar una vaca con la que alimentar a su hijo pequeño, pero luego al ganar la prueba en menos de 2 horas y 9 minutos se ganó otros 10.000.
En mujeres ganó Helen Bekele 2:25:04, de Etiopía al igual que los dos siguientes corredoras.
Foto de la ganadora e historia: El Pais
Si esta es una historia hermosa de esfuerzo e ilusión, vi otra que me impactó sobremanera y que me hizo pensar que una buena preparación y medios pueden salvar muchas vidas.
El caso fue de un corredor que cerca del final cayó al suelo dejando de latir su corazón (varios al igual que en otros maratones sufrieron desvanecimientos), pero en el mismo momento la policía se puso a reanimarle y en un momento estaba a su lado una ambulancia que traía los aparatos necesarios para reanimarle, al poco tiempo estaban otras dos ambulancias, después de unos minutos de gran expectación al corredor le volvía a latir el corazón, acto seguido lo subieron a una ambulancia y lo llevaron a un hospital para ver su evolución.
No cabe duda que cuando hay preparación e ilusión por lo que se hace (atletas, policía, técnicos y facultativos de las ambulancias), la vida puede darnos otra oportunidad, este es un ejemplo que debería hacernos pensar en lo importante que es saber dar un masaje cardíaco e incluso en saber utilizar un desfibrilador, debería ser una asignatura obligatoria en la escuela.